TXT: Alondra Celso
El pasado 10 de Febrero se llevó a cabo la entrega 61 de los premios Grammy, en los cuales se vivieron momentos muy importantes, sin embargo, uno de los más esperados era saber quién sería el ganador a “Mejor álbum de rap”.
Entre los nominados se encontraban Cardi B con “Invasion of Privacy”, Nipsey Hussle con “Victory Lap”, Traviss Scott con “Astroworld”, Pusha T con “DAYTONA” y Mac Miller con el nostálgico “Swimming”.
Mucho se habló sobre la primera nominación de Miller a los Grammy, pues se podría pensar que este gran logro fue debido a su inesperada muerte hace apenas unos meses.
Con tan sólo 26 años, Malcolm, nos dejó un gran legado. En Swimming pudimos sentir la nostalgia de una manera más real, pues además de evolucionar, experimentar e innovar musicalmente, el compositor no tuvo miedo de tocar temas más profundos, reflexionar y hacer una introspección sobre su vida. Logró ser completamente trasparente, auténtico y sobre todo, real.
Todo esto se resume en una de las líneas de la primera canción del álbum, “Come Back to Earth”, donde Miller narró de forma tan detallada el proceso lento y tedioso que conlleva enfrentar las culpas y el entendimiento de la tristeza misma. “I was just drowning, but now I’m swimming through stressful waters to relief”
El joven rapero mostró su dolorosa resignación y tristeza sin convertirla en un tipo de espectáculo.
Por esto y más, Swimming de Mac Miller merecía ganar el Grammy a mejor álbum de rap.
Aquí la auténtica joya melancólica:
https://open.spotify.com/album/5wtE5aLX5r7jOosmPhJhhk?si=hxN4GuDaTA26mwWylmH9lw